campiña ecijana

campiña ecijana

domingo, 7 de agosto de 2016

He salido del armario


 
 
 
 
  Estoy coladito por Ella.
          Hoy a solas dimos un paseo por el parque, era temprano y el personal andaba todavía remoloneando engullido por las sábanas, en esas condiciones anda uno más relajado y a gusto, que no con tanto mirón. Marchábamos tranquilos, charla que te charla…  bueno en realidad soy yo el que  hace de parlanchín, voy tan emocionado que a veces pierdo la consciencia y no me doy cuenta y antes que ella me responda ya ando a la descarga con otra “porción de mi conferencia” o parrafada; ella me mira fijamente a la cara, escucha y asiste.
         Terminamos colocados en un banco bajo los árboles, a gustito como  enamorados y entretenidos  viendo como el sol se colaba de lado entre los troncos y en forma de rayos como linternas de acomodador de cine nos iluminaba los pies al cruzar  delante nuestro;  los “pericos” regaban los parterres de las plantas mientras los pájaros revoloteaban alrededor  y al acecho de cualquier bicho viviente. La vida es posible con la muerte, le dije a mi compañera mientras con las yemas de los dedos le acariciaba bajo la barbilla y me besó la mano, aunque quizás entendió algo extraño en mis apreciaciones; yo sonreí y para quitarle  “hierro” a la “profundidad” de mi teatro, levanté su barbilla y la besé en la frente  ¿Quién te ha de querer más que yo? Le dije con la mirada puesta en esos profundos y brillantes ojos color de una mezcla de aceituna y castaña pilonga con miel, que cuando se queda fija mirándome me cautiva.
          Algún que otro transeúnte, madrugador como nosotros,  al pasar nos miraban y con sonrisa algo irónica y diría yo que hasta maliciosa (la gente lo critica todo) nos daban los buenos días. Yo lo comprendo, una persona de mi edad, casado y con hijos grandes  ahí sentado a esas horas tan tempranas y ya dándole a la “sin hueso” con ese ahínco…   he salido del armario yo también, no tengo ni idea de las consecuencias, pero sé por seguro que es lo mejor, las cosas se ha puesto de moda decirlas claras y a la cara con la cabeza levantada. Ya no me importa lo que digan ni me quita el sueño aquello que puedan pensar ni de mí ni de ella.  Sin dejar de querer  a la de siempre ni a nuestros frutos, la quiero a esta también  y por encima de quien sea no la dejaré. Ello no ha de restar nada de lo que yo sienta por los demás…  más bien al contrario.
         Cuatro años ya de nuestro encuentro y de la declaración por mi parte de unas intenciones que han de pasar por lo más bonito de nuestras vidas: vivirlas juntos. Tiene una carita preciosa, unos ojos que en su profundidad me pierdo, el pelo ensortijado color castaño oscuro, anda como Nuréyev  cruzando el  gran escenario del Bolshói y cuando la veo contenta y sonriente, que son la mayor de las ocasiones…    contagia vida y su encanto me inyecta savia.
          Se llama como la luna y hoy, he decidido que esto, lo nuestro, ha de saberse y lo haré público sin cortedad alguna. Ya no me tapo más.
          Lola te quiero guapetona. Es mi perrita.
Montero Bermudo.
S. Juan Despi, 7 de agosto de 2.016
 
 
 

3 comentarios:

  1. Muy dulce como siempre piro sentimiento

    ResponderEliminar
  2. Muy dulce como siempre piro sentimiento

    ResponderEliminar
  3. Es una declaración de amor en toda regla, soy grandecito de edad, pero en el fondo muy niño y todo por empezar. Así que he decidido salir del armario Silvia y vivirlo sin tapujos. Gracias por entenderme, tú si que tienes sentimientos.

    ResponderEliminar