campiña ecijana

campiña ecijana

lunes, 3 de noviembre de 2014

San Martín de Porres


Hoy 3 de Noviembre y según el santoral: San Martín de Porres.

Viene a mi memoria una fecha  añorada, agridulce, penosa…  ahora ya como lejana, pero que si cierra uno los ojos no cree que fuera más allá del fin de semana pasado. Nada de eso, en realidad el tiempo se encargó de quitarme la razón alejando todo ello del momento y la realidad que vivo.

Por ser la fecha que es y porque mi amigo Salva a través del internet me lo recuerda, entresaco unas líneas escritas en ese popurrí que sobre mis vivencias tengo escrito.  

 

“… Entre otras cosas, recuerdo unos de aquellos últimos días,  que me cogió mi madre  y me hizo que la acompañara hasta  la iglesia de Sta. Florentina, allí por el Arco de Sevilla; fuimos a llevarle una velita al santito Porres,  fray escoba, aquel santo milagroso que las hermanas dominicas tienen  tan limpio y cuidadito y al que mi madre se la  tenía prometida  cuando  le ayudara a  encontrar cobijo  para sus niños en Barcelona.

Entramos por la puerta lateral que se encuentra en la calle Zurcidera y por ahí Ella me introdujo en esta iglesia-convento, la que yo no conocía, acercándome hasta la capillita que tiene S. Martín de Porres,

donde le encendió la ofrecida vela, cosa que yo no sabía, pero quiso que me enterara y se la colocó delante en unos hierrecitos adaptados para tal fin, previo a unos instantes en cabizbaja reflexión elevó la mirada hacia el Santo,  lo miró fijamente un momento y aunque no escuché lo que le dijo, sé que le dio las gracias, pues así me lo aclaró ella. En todo momento  guardé una compostura de respeto pues mi madre era muy seria en sus compromisos y aquello me daba a mí que era serio,  me limite a observarlos a los dos y cuando mi madre santiguándose, dio por terminada aquella silenciosa conversación, imitando su gesto, salí junto a ella de la iglesia.

Ella agradecida, cumplió su palabra y satisfecha por ver cómo se iba encaminando aquella situación, en la que no encontraron otra salida que la de abandonar el pueblo y que seguramente sería la misma que yo hubiese tomado de estar en su lugar, no sabía, ni se podía imaginar, que aquella decisión iba a marcar mi vida.

Saldríamos del bache y la mayoría, encontrándose medianamente acomodados  en esta sociedad, no andan descontentos, pero yo tengo muchas dudas de los “progresos” aquí conseguidos, casi todos han sido materiales y una vez  “llenado la barriga”  me queda  un inmenso vacío que solo lo ocupa la pena.”

 

Nunca quise y eso que soy bastante rebelde, acercarme a Fray escoba para ofrecerle mayor vela que aquella, Él ya sabe de mis intenciones y a mi madre, esa Santa que con todo el amor del mundo me depositara en esta vida cara a lo mejor que me pudiese venir, no le hago ese feo.
 
 
Montero Bermudo.

   

No hay comentarios:

Publicar un comentario