Domingo de Ramos
Treinta y dos primaveras ya de un acuerdo a voz de
palabra seria y cabal, la que pude compartir con un hombre que llegaría con el
tiempo a marcar con sus formas parte de mis maneras de sentir. Mi primo Juan
Antonio que me impregnara de una esencia de la que no he de desprenderme en la
vida. Todos esos años desde aquella noche ecijana y de jueves santo, noche “confalonera”
por excelencia y del Cristo de Sta. Cruz, Puerta Palma, Zamorano y Caleros, el
Cristo de “mis principios”, aquel que marcara por el estrechillo de Carreras y
“Puerta Cerrá” el destino de mis sentimientos cofradieros y a tan temprana
edad; allí en mi puerta, ante Él, sellaríamos el compromiso para el venidero
siguiente, treinta y uno ahora, con la premisa de: “el año que viene tienes tu
sitio, faja y costal bajo el Cautivo”, compromiso y palabra cumplida y que hoy,
pensando en todo aquello, cuando están por dar la hora poética lorquiana,
cuando los toreros se entregan en su interior al intercambio del arte por la
vida, nosotros con menos valor y sin
entregar el pellejo, pero con la mejor de las voluntades, tomaríamos café en “El Gasolina”
al salir de ese rinconcito de la Fe de Sta. Bárbara como ellos, vestidos “de
luces” camino del patio de Sta. María, donde una muchedumbre entusiasmada
esperaba en la barrera rodeando a la Virgen del Valle, algo también de nosotros
¡Bendito sea el Señor! Responsabilidad, entrega y todos los sentimientos a flor
de piel, no dando por válido tanto rango, más sí la responsabilidad, haríamos
cuanto éramos capaces, cumpliendo fielmente nuestras creencias y voluntades.
Hoy, transcurrido tantos años, Él sigue estando y significando lo
mismo… nosotros, nosotros no me
atrevería a tanto, hay momentos que duda uno si no es posible hacer más, son
muchos los que nos rodean con muchas carencias, a los que quizás no atendemos,
por mucho que queramos justificar, la procesión no es todo y este año, como el
pasado, habrán servido de ejemplo para
mirar nuestro más adentro y comprobar que se puede y debe vivir la semana santa con hechos y voluntades
de entrega, la que deben de pasar de los pensamientos a los hechos, siempre hay
quien lo necesita y la espalda no se le da ni al enemigo.
Con todos los respetos que se merecen mis hermanos, allá en la hermandad
que se encuentren y con el más grande y cariñoso recuerdo para tantos que nos
faltan y lo fueron.
¡¡¡Va por ti Juan Antonio!!!
Montero Bermudo
Primavera de 2021
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